El 12 de abril se conmemora el Día Internacional de los Niños de la Calle, una fecha que debe resonar en la conciencia colectiva del mundo. En América Latina y el Caribe, las alarmantes cifras sobre la niñez reflejan una realidad crítica: 39 millones de niños, niñas y adolescentes enfrentan pobreza extrema. De ellos, 1 de cada 3 vive en contextos de conflicto, exponiéndose a más violencia, explotación y abuso.
Uno de los grupos más vulnerables son los niños migrantes, que se enfrentan a barreras insuperables para acceder derechos básicos como la educación. Según un reporte de Save The Children para América y el Caribe realizado en el año 2022, como consecuencia de la pobreza y los altos índices de violencia en América Latina y el Caribe, alrededor de 3.7 millones de niñas, niños y adolescentes se encuentran en procesos de migración y desplazamiento con la esperanza de encontrar una mejor oportunidad de vida.
De acuerdo con la UNESCO y su Plan de Respuesta para Refugiados y Migrantes 2023, 1 de cada 2 migrantes venezolanos carece de un acceso adecuado a servicios educativos. Esto es aún más alarmante, considerando que uno de cada cinco refugiados o migrantes en Latinoamérica es un niño. Muchos de ellos han dejado atrás sus escuelas y, al cruzar fronteras, se ven atrapados en un ciclo de exclusión, pobreza y violencia.
Desde Coalición por Venezuela, hacemos un llamado urgente a la movilización y medidas de parte de todos los actores. Para construir un futuro inclusivo y próspero, es fundamental que gobiernos, organizaciones, empresas y la sociedad civil trabajen en conjunto para proteger los derechos de los niños más vulnerables. La educación de nuestros infantes es esencial para transformar su realidad.
Además, compartimos las principales acciones propuestas a los Gobiernos por UNICEF en su Programa de acción para niños y niñas en tránsito, para asegurar el bienestar de estos niños:
En este Día Internacional de los Niños de la Calle, instamos a todos a reflexionar sobre cómo podemos contribuir a disminuir estas preocupantes cifras. La responsabilidad es conjunta: juntos podemos hacer la diferencia.